El técnico suizo, ex del Union Berlin, firma hasta 2028 y asume el reto de salvar al colista tras la salida de Bo Henriksen
Mainz, Alemania – El Mainz 05 ya tiene nuevo líder para su banquillo. Tras el despido de Bo Henriksen y el breve paso del interino Benjamin Hoffmann, el club ha oficializado este viernes la llegada de Urs Fischer, un entrenador de enorme prestigio en la Bundesliga, conocido por su histórica etapa al frente del Union Berlin entre 2018 y 2023. Su contrato con el Mainz se extenderá hasta 2028, una apuesta de largo plazo para un equipo que actualmente ocupa el último puesto de la clasificación y atraviesa una racha crítica.
Según informó el propio club, Fischer quedó convencido rápidamente por el proyecto. “No hay tareas fáciles en el fútbol, pero eso es precisamente lo que lo hace interesante. Mantuve conversaciones muy convincentes con Christian Heidel y Niko Bungert; el Mainz 05, en general, encaja conmigo”, declaró el suizo en el comunicado oficial. La directiva, por su parte, destacó la rapidez con la que el técnico aceptó el desafío. “Estamos muy contentos de que se haya entusiasmado de inmediato y sin dudar por nuestro camino conjunto”, afirmó Christian Heidel, quien definió a Fischer como un entrenador capaz de “estructurar y desarrollar equipos y ganarse cualquier vestuario con su carácter tranquilo pero empático”.
La elección de Fischer no es casual. Durante su paso por el Union Berlin, el técnico llevó al club desde la lucha por la permanencia hasta competiciones europeas, consolidando un estilo sólido, disciplinado y eficaz. Ese perfil es precisamente el que busca el Mainz para revertir una temporada marcada por ocho jornadas sin ganar y un juego que no ha encontrado estabilidad. De hecho, ni siquiera con Hoffmann como interino lograron puntuar ante el Borussia Mönchengladbach (0-1), acelerando la necesidad de un cambio definitivo.
El debut de Fischer no será sencillo. Este domingo, el nuevo Mainz visitará al Bayern de Múnich, líder de la Bundesliga, en un duelo que supone uno de los mayores retos posibles para un colista. Sin embargo, existe un precedente esperanzador: hace un año, el Mainz logró precisamente ante el Bayern la primera derrota de Vincent Kompany en la Bundesliga, una prueba de que los rojiblancos son capaces de sorprender incluso en escenarios adversos.
Fischer asume el cargo con la misión urgente de reactivar competitivamente al equipo, recuperar confianza y reconstruir una estructura táctica fiable. El club confía plenamente en que su experiencia y personalidad puedan conducir al Mainz a otra remontada salvadora, como la que logró Henriksen en su llegada en 2024. Ahora, el relevo lo toma un entrenador con historial probado y con un desafío mayúsculo por delante.
LAVOLEA 
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