El extremo del PSG sucede a Lamine Yamal tras una temporada explosiva marcada por la conquista de la Champions

Turín, Italia – Désiré Doué, atacante francés del Paris Saint-Germain, se proclamó este lunes ganador del Golden Boy 2025, imponiéndose en una edición muy competida al central del FC Barcelona Pau Cubarsí, uno de los favoritos al premio otorgado por Tuttosport.

El talento joven europeo vuelve a mirar hacia París. Tal y como destacó Mundo Deportivo, el extremo de 20 años Désiré Doué se hizo con el Golden Boy 2025, el premio que reconoce al mejor futbolista Sub-21 del año y que el pasado curso conquistó Lamine Yamal. El jugador del PSG culmina así un año sobresaliente, coronado con la Champions Leaguelograda por el conjunto parisino, en el que ha sido uno de los protagonistas del proyecto de Luis Enrique.

Doué, que ha brillado por desequilibrio, verticalidad e impacto en los momentos decisivos, se impuso en una votación especialmente reñida entre las mayores joyas del fútbol continental. Entre ellas, el central del Barça Pau Cubarsí, que a sus 18 años optaba por segunda vez consecutiva al galardón. Su madurez, liderazgo defensivo y regularidad lo habían colocado entre los favoritos para los votantes de Tuttosport, organizador del premio. Pese a ello, el empuje mediático y la influencia determinante de Doué en los meses finales de la temporada terminaron decantando el veredicto.

La gala celebrada en Turín tuvo un marcado color parisino. Más allá del triunfo individual del atacante, el PSG también fue protagonista en los reconocimientos institucionales. Nasser Al-Khelaifi fue nombrado mejor presidente del año, mientras que Luis Campos, arquitecto del ambicioso proyecto deportivo del club, recibió el premio al mejor mánager de 2025. Una muestra de la fortaleza del proyecto del PSG, que vive uno de los momentos más consistentes y exitosos de su historia reciente.

El Golden Boy confirma la irrupción de Doué en la élite y reafirma el dominio del PSG en el panorama juvenil europeo. Para Cubarsí, el reconocimiento de estar nuevamente entre los finalistas subraya su meteórica progresión en el centro de la defensa blaugrana. Para Doué, supone la consagración: el paso definitivo de promesa a realidad.