El técnico danes atraviesa su momento más delicado desde su llegada a los Spurs. Parte del vestuario habría perdido confianza tras el mal inicio de temporada

Londres – En el derbi londinese entre el Tottenham Hotspur vs Chelsea, se produjo una situación bastante tensa al finalizar el partido. Tras perder los ‘Spurs’ por 0-1, con un gol fallo de Xavi Simons y Van de Ven, el capitán holandés y su compañero Spence no saludaron a su entrenador, Thomas Frank.

En un vídeo grabado por Chris Cowlin se ve claramente al técnico, que primero da la mano a Maresca, acercarse a los dos jugadores y hacer un gesto como de extender la mano para saludarles mientras los futbolistas miran a otro lado y continúan caminando sin detenerse ni un segundo a atender a su entrenador. 

En la rueda de prensa del post partido, el entrenador danes quiso exculpar a los jugadores de este incidente:

«Los jugadores están, por supuesto, frustrados. Les gusta hacerlo bien, les gusta ganar, les gusta rendir al máximo, así que lo entiendo. Podemos ser constantes tanto en las buenas como en las malas. Por eso hablé con la afición como lo hice. Es más divertido cuando ganamos, se lo aseguro”.

«Entiendo por qué haces la pregunta, pero diría que es un problema menor. Micky van de Ven y Djed Spence están haciendo todo lo posible. Todos estamos frustrados. Hacemos las cosas de manera diferente. No creo que sea un gran problema», concluyó el entrenador. 

Las tensiones siguen en ese vestuario, varios jugadores no están contentos con la forma de jugar de Thomas Frank. La afición quiere otro estilo de juego, el del exentrenador del Brentford no casa con la afición del Tottenham Hotspur Stadium. Los ‘Spurs’ tienen una situación complicada. Mientras los resultados han llegado, la tensión no existía, sin embargo, en cuanto los resultados han empezado a ser irregulares, las costuras se han empezado a manifestar de forma clara.