Un juez considera que el procedimiento sancionador vulneró su derecho de defensa y ordena reabrir el expediente

Un juez del Juzgado Central de lo Contencioso-Administrativo número 2 de la Audiencia Nacional ha dictado una sentencia que da la razón a Pedro Rocha, expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), anulando la inhabilitación impuesta contra él por el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD). Según la resolución, la sanción era “contraria a derecho” y se produjo una clara indefensión, al no haberse valorado sus alegaciones en el proceso original.
Rocha recuperará su derecho a presentarse a elecciones federativas, puesto que la sanción de dos años de inhabilitación y la multa económica quedan anuladas y el caso deberá volver a instruirse desde el TAD tomando en cuenta sus argumentos.
Lo que falla la sentencia
El magistrado encabezado por Luis Alfredo De Diego considera que el TAD actuó sin respetar el principio de contradicción: las alegaciones y pruebas presentadas por Rocha en plazo no fueron admitidas ni valoradas antes de dictar la sanción. Esa omisión vulneró su derecho de audiencia. La resolución ordena la retroacción del expediente al momento previo al dictado de la sanción para que el TAD reabra la instrucción, analice las pruebas y emita un nuevo fallo ajustado a derecho.
Origen de la sanción
En julio de 2024, el TAD sancionó a Rocha con dos años de inhabilitación y una multa de 33.000 €, por varias actuaciones consideradas irregulares durante su mandato en la Gestora de la RFEF: el cese del secretario general Andreu Camps, la rescisión de un contrato con un asesor externo y la personación de la RFEF como acusación particular en un caso judicial. De esas tres causas, sólo la destitución de Camps fue considerada infracción grave justificante de la inhabilitación.
Reacción de Pedro Rocha
En un comunicado, Rocha celebró la decisión judicial y calificó su sanción de “injusta” y producto de un “linchamiento improcedente”. Aseguró que estudia acciones legales adicionales porque considera que fue tratado con falta de buena fe y lealtad por parte del TAD.
La anulación de esta sanción tiene implicaciones inmediatas para el panorama federativo español. Hasta ahora, la inhabilitación impedía que Rocha pudiera presentarse a las elecciones de la RFEF, celebradas el 16 de diciembre de 2024, y había sido un punto de litigio legal constante.
Con la sentencia, se abre una posibilidad de reordenar el proceso electoral y cuestionar decisiones pasadas en la federación. Ahora corresponde al TAD reexaminar el expediente respetando el derecho de Rocha a defenderse, lo que podría dar lugar a un nuevo escenario competitivo en el organigrama del fútbol español.





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