El club blaugrana recibirá unos 44 M € a cambio de lucir el lema “R.D. Congo – Coeur de Afrique” en la indumentaria de entrenamiento y liderar programas formativos en el país

El FC Barcelona ha sellado un acuerdo oficial con el Gobierno de la República Democrática del Congo (RDC), que se extenderá por cuatro temporadas hasta el curso 2028‑29 y generará ingresos estimados en entre 40 y 44 millones de euros, aproximadamente entre 10 y 11,5 M € anuales, según fuentes de Reuters y del club. En virtud del convenio, todos los equipos profesionales del Barça —fútbol masculino, femenino, baloncesto, balonmano, fútbol sala y hockey patines— lucirán el emblema “R.D. Congo – Coeur d’Afrique” en la parte posterior de sus camisetas de entrenamiento.
Más allá del patrocinio visual, el acuerdo contempla un programa formativo a través de las Barça Academies, incluyendo campus y clínicas para niños congoleños, y cursos de entrenamiento estructurados para técnicos locales mediante el Barça Innovation Hub (BIHUB). Además, el club ha anunciado la creación de una instalación cultural llamada “Casa de la RDC” en el futuro Espai Barça / Spotify Camp Nou, que servirá como exposición inmersiva para mostrar la identidad deportiva y cultural congoleña.
El Barça define esta alianza como una estrategia de fomento del desarrollo deportivo, cultural y de paz en la RDC, promoviendo valores asociados a su modelo de juego y ética institucional. Según estimaciones oficiales, este acuerdo proporciona una vía clave para cumplir con la regla financiera 1:1 de LaLiga, ya que supone una importante inyección económica externa.
No obstante, la alianza ha generado críticas dentro de la sociedad civil congoleña, que cuestiona el uso de fondos estatales en publicidad internacional cuando el país afronta carencias graves en sanidad, educación e infraestructuras. Manifestaciones en Kinshasa instaron al gobierno a priorizar la inversión local en lugar de patrocinios costosos al extranjero.
En resumen, el FC Barcelona logra un significativo pacto económico estratégico con la RDC que refuerza sus finanzas y proyecta su modelo en África. A cambio, se compromete con formación deportiva, cultural y educativa en un país con enormes retos, aunque no exento de debate y controversia.





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