El lateral izquierdo regresa al club tras su paso por Manchester United y Benfica, firmando un contrato por seis temporadas hasta 2031

Álvaro Carreras con la camiseta del Real Madrid; foto: YouTube.
Álvaro Carreras con la camiseta del Real Madrid; foto: YouTube.

El Real Madrid ha oficializado el fichaje del lateral izquierdo español Álvaro Carreras procedente del Benfica, en una operación cifrada en 50 millones de euros, pagaderos en varios plazos, según medios oficiales. Carreras firmará hasta junio de 2031, recuperando su vinculación con el club donde se formó entre 2017 y 2020 antes de emigrar al Manchester United. Con solo 22 años, el lateral gallego vuelve convertido en uno de los futbolistas más prometedores en su posición en Europa.

Tras pasar por el Manchester United sin debutar en el primer equipo y gozar de experiencias en préstamo en Preston y Granada, Carreras llegó a Benfica en enero de 2024 inicialmente cedido, firmándose más tarde su pase definitivo. En la temporada 2024‑25 se consolidó como titular indiscutible: disputó 32 partidos en la liga portuguesa, repartió varias asistencias y anotó goles clave, incluyendo actuaciones determinantes en la Copa de la Liga y la Champions League. También fue el segundo jugador con más minutos en Benfica, solo por detrás de Otamendi.

Este fichaje es el tercer refuerzo defensivo del verano tras las incorporaciones de Trent Alexander‑Arnold y Dean Huijsen, reforzando la zaga merengue en una temporada marcada por la falta de títulos y lesiones en el lateral izquierdo. La llegada de Carreras también se entiende como parte del proyecto de Xabi Alonso, que valoró su inteligencia táctica, control de balón y capacidad para adaptarse a distintos esquemas defensivos.

Además, el club ha negociado parte de la operación mediante la cesión del canterano Rafael Obrador al Benfica por aproximadamente 5 millones de euros, como parte de un acuerdo paralelo que facilitó el traspaso de Carreras.

En resumen, el regreso de Carreras representa una apuesta estratégica: recuperar talento formado en casa con experiencia internacional y aportación inmediata. Su juventud, combinado con su potencial ofensivo y defensivo, le convierte en una pieza clave para la renovación de la plantilla blanca.

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